Bueno, no lo he contado y creo que a estas alturas ya estáis todos más que enterados de todos mis movimientos, pero al fin y al cabo para esto es para lo que está este rinconcito, ¿no? Para ir contando y que se convierta en una especie de diario que pueda leer después cuando la memoria me empiece a fallar :P
El fin de semana de Halloween estuvo completo a tope. Por días:
Viernes. Estuve todo el día en un rodaje. Me levanté a las 4:45am y llegué a casa de vuelta a las 9pm después de todo el día conduciendo de un lado para otro y pasando frío. Estaba cansada y sin muchas ganas pero, por supuesto, no me quedé en casa. Había quedado con mi compi de piso, Noemí, en salir así que, salimos. Habíamos comprado unos camisones horribles para romper y manchar de
sangre Así que nos los pusimos, nos maquillamos un poquito y salimos a la calle:
Fuimos a una casa en Brooklyn de un amigo suyo. Monta en el sótano una especie de
pasaje del terror con gente disfrazada dando sustos y decoración de nivel. Tenía hasta cuatro cámaras de vídeo conectadas a una televisión arriba en la que puedes ver cómo la gente se asusta al pasar! Y sobre la 1 movió los paneles que hacían el pasadizo, lo dejó diáfano y: fiesta! No aguantamos demasiado porque yo estaba muerta y unos amigos de Noe se iban a casa en coche y aprovechamos la coyuntura para que nos llevaran!
El sábado fue la tan ansiada fiesta de Halloween. Organizamos en la sala común de nuestro edificio una fiesta a lo grande con nuestros vecinos de enfrente. Decoramos todo con luces rojas y naranjas, telarañas y demás e invitamos a amigos, amigos de amigos y amigos de amigos de amigos. Dicen los rumores que vino bastante más gente de 200 personas. Teníamos Dj, bebidas a tutiplen y un buen rollo espectacular. Y disfraces, muchos disfraces. Esto es otro nivel de disfraces, en general. Terminamos a las tantas, como era de esperar. Mi disfraz de
Poison Ivy era de mi compi Noe que lleva aquí muchos años y muchos Halloweenes a sus espaldas.
Noe, Pablo y yo a.k.a los anfitriones del 5B.
El domingo era el día
real de Halloween. Y pese a la resaca mortal y la pereza, nos liamos la manta a la cabeza y salimos a la
parade (o cabalgata...). Bajamos a Spring street con la sexta avenida para cogerla y, en vez de quedarnos detrás de las vallas, nos pusimos por el medio a ser "protagonistas". Una pena el frío helador que hacía. Una vez más reutilicé uno de los miles de disfraces de Noe, esta vez de "flamenca". Un vestido un poco concepto americano de flamenca pero la verdad es que no iba nada mal. Decidimos que la combinación con la chaqueta de cuero lo hacía muy Martirio. Solo me faltaba el vinilo en la cabeza y las gafas de sol.
4 comentarios:
¡¡ Qué cambios de imágen !!.. Y lo bien que te sientan... bueno, el primero, no.
;-)
¡¡¡¡Estás preciosa a lo Martirio!!!!
el anio que viene aniades un vinilo a la peineta y ya martirio total!!!!
Noe
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Tu flan